María Acaso de despedida (Laura de Felipe Pérez)

    El lenguaje visual es definido por María Acaso como el código específico de la comunicación visual. "El lenguaje visual es el sistema de comuicación semiestructurado más antiguo que se conoce". " Los niños y niñas, antes de saber escribir, son capaces de realizar representaciones visuales".

 

 

    A lo largo del cuatrimestre hemos trabajo este lenguaje visual, de manera inconsciente, pero hemos desarrollado nuestra representación creativa, nuestro lenguaje (visual) y hemos descubierto nuevas formas de comunicarnos. Hemos contado historias a través de puntos y líneas, hemos recreado el circo a partir de cartón y témperas, hemos trabajado de forma dinámica a autores como Picasso...

 

María Acaso en su libro El lenguaje visual reconoce las herramientas del lenguaje visual como:

- La forma.

- El tamaño.

- El color.

- La iluminación.

- La textura.

- La composición.

- La retórica visual.

 

    Todas estas herramientas, de una forma u otra las hemos trabajado a lo largo del cuatrimestre: hemos visto obras y anuncios que empleaban la retórica visual, hemos trabajado los diferentes colores y su composición, las diferentes texturas a través de los diferentes materiales, las formas, los tamaños y la composición a través de los puntos y las líneas... Si hubiese tenido que hablar de estas herramientas hace cuatro meses, no habría sido capaz de escribir ni cinco palabras seguidas. A lo largo del cuatrimestre hemos realizado diferentes proyectos, sin darnos cuenta en ese momento que estábamos trabajando la forma, el tamaño, el color o la textura. Ese es el talón de Aquiles de nuestro proceso de enseñanza-aprendizaje. En la mayoría de los centros los profesores no dejan que los niños experimenten, que le den sentido a sus experiencias, que exploren y aprendan por sí solos y de forma dinámica; siendo el profesor un apoyo, un guía y un investigador que promueva nuevas prácticas educativas.

 

    Al igual que ahora mismo soy consciente de que sin la práctica, sin la experimentación de la teoría, no podemos asimilarla completamente; deberíamos ser conscientes todos de que a la hora de enseñar, estamos haciendo eso. Explicacmos conceptos, procesos, leyes... Pero no las ponemos en práctica ni dejamos que los alumnos exploren con ellas. Cometiendo este error, no sólo estaremos influyendo en su aprendizaje, sino también en el nuestro, a la hora de saber enseñar y a la hora de saber aprender de nuestros alumnos.